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Mateo Torriente

Mateo Torriente

MATEO TORRIENTE (Palmira, Las Villas, 1910- La Habana, 1966)

Alcanza el primer expediente de dibujo y modelado en San Alejandro en 1937, justo cuando tiene lugar fuera de los predios de formación artística profesional el denominado Estudio Libre de Pintura y Escultura.

Los lauros alcanzados como graduado de Bellas Artes le facilitan una “bolsa de viaje” que le permite conocer Europa; asistir a un curso en la Escuela Libre de la Grande Chaumière de París, y recorrer varias ciudades italianas donde profundiza en el estudio de los códigos clásicos a la vez que trata de hallar los vínculos ocultos entre el arte clásico y los nuevos imperativos de la escultura modernista que tanto ha admirado en Francia, a través de la obra de Rodin y sus mayúsculos discípulos Maillol y Bourdelle.

De regreso a Cuba, trabaja una línea de cauto aliento expresionista con la que se desmarca de la frialdad técnica y el rígido modelado academicista, tal y como lo testimonian las obras presentadas en una muestra personal –en 1939 – en el Liceo de la ciudad de Santa Clara.

En la década del 50, después de una provechosa estancia en Bruselas y un intenso periplo por varias regiones de México Mateo Torriente Bécquer se da a conocer en su país como una figura sobresaliente dentro del panorama escultórico local.