Raúl Martínez, 15 repeticiones de Martí, 1966

Hacia 1966 Raúl Martínez trabaja intensamente
en una serie que será decisiva en
su original asimilación del pop. El tema seleccionado
gira alrededor de la interpretación
plástica de la imagen de José Martí. Los primeros
Martí, realizados sobre soporte de papel,
emergen envueltos en una atmosfera neblinosa,
resultado de una pincelada gestual,
de marcado carácter expresionista, y un uso
restringido del color. Cuando el artista siente
la necesidad de trasladarlo a la tela, introduce
como novedad una mayor riqueza cromática
–siempre con una intención expresiva – y la
imagen repetida como si al multiplicarla obtuviera
un necesario efecto dinamizador de la
composición, e integra al espíritu renovador
de los 60 un icono fundacional de la cultura
cubana. A través de esta serie se afirma la contemporaneidad
del pensamiento martiano y su
proyección iluminadora dentro de la sociedad.
En 15 repeticiones de Martí el artista obtiene
sugerentes matices en la expresión del rostro,
mediante un uso dramático del color.La iconografía
martiana abre el camino a la representación
pictórica de los héroes contemporáneos
en la historia reciente de Cuba; los retratos de
Fidel, Camilo y el Che surgen de la conjugación
del pop –al estilo de Warhol y Lichtenstein
– con las graciosas y emotivas representaciones
populares que aparecen en los carteles
de las grandes movilizaciones en la Plaza de la
Revolución. De esta manera, cobra vida en los
cuadros de Raúl, un impresionante repertorio
visual surgido de la esencia misma del pueblo y
sus líderes ayudando a modelar la imagen dinámica
y diversa de una época singular. (R.C.A.)